lunes, 31 de agosto de 2009

MITOS DE LA GRIPE A POR EL DR. JUAN CARLOS DAVID





Comienza mañana el nuevo curso 2009-10 y dado que la llamada gripe A va a afectar al mismo en mayor o menor medida, no está de más escuchar algunos consejos fruto de la razón y la experiencia.

domingo, 30 de agosto de 2009

EL CSIC INICIA LAS PRIMERAS CATAS ARQUEOLÓGICAS DE LA ATLÁNTIDA


El área de actuación está en el ángulo Sur de la confluencia del Guadiamar y la Madre · Sebastián Celestino y Juan José Villarías coordinan la investigación.

Vía: Carlos López, Hinojos Huelva Información.es, 30 de agosto de 2009

El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha comenzado a realizar las primeras catas arqueológicas en las Marismas de Hinojos. El ambicioso proyecto español persigue poco menos que una 'quimera': hallar las ruinas de la Atlántida, la mítica ciudad descrita por el filosofo griego Platón. Sin embargo, los sueños conforman el camino que sirve de nexo de unión con la realidad más palpable y, más aún, cuando existen fundamentos más que suficientes para sostener que las ruinas de lo que fue la añeja ciudad más prospera del Atlántico se podrían encontrar soterradas bajo las marismas del municipio Condal de Hinojos.

Los trabajos que coordina Sebastián Celestino del instituto de Arqueología de Mérida, conjuntamente con el investigador Juan José Villarías, siguen su curso de forma lenta e inexorable, si bien a expensas de que den sus frutos o no, se harán públicos los pormenores de la investigación.

El área de actuación comprende la zona del 'Pacil del Mal Tiempo' y 'Cardales', a lo largo del ángulo sur que se forma por la confluencia del río Guadiamar con la denominada Madre; si bien, el secreto se mantiene en lo que respecta al punto exacto en el que se han desarrollado las primeras catas. Estas perforaciones habrán de dilucidar si existe alguna actividad antrópica que pueda certificar la existencia de vestigios de un asentamiento humano sepultados o si, por el contrario, la forma que han adquirido las marismas responde a un mero "fenómeno geomorfológico".

Tal y como ya adelantó Huelva Información estos primeros sondeos han comenzado en la última semana de verano, ya que en estas fechas se produce una conjunción de factores medioambientales que favorecen los trabajos; entre ellos, por ser el momento en que más baja se encuentra la capa freática en la zona marismeña o, lo que es lo mismo, la primera capa de agua subterránea que encontramos al realizar una perforación.

Sin embargo, este periódico ha podido saber que los primeros trabajos del CSIC se circunscriben a labores de reconocimiento, todo ello a expensas de que en próximas fechas desembarque un equipo norteamericano con tecnología de última generación, con la cual se realizarán nuevas prospecciones sobre el terreno en base a las cuales se determinará la zona más idónea para proceder a las labores arqueológicas y de perforación.

El alcalde hinojero, Manuel Naranjo, (IU) confía ciegamente en que finalmente se hallen restos de la ciudad que dejó descrita para la posteridad Platón. El edil sostiene que su hallazgo "sería un hito para la arqueología y la antropología, además de blindar aun más el espacio de Doñana".

Naranjo también ha subrayado las buenas sensaciones de los científicos, dado que tanto "Sebastián Celestino Pérez como Juan José Villarías se encuentran muy ilusionados y alentados con el proyecto. Están convencidos, sin duda, de que la hipótesis de los alemanes son ciertas".

Cabe recordar que la teoría de que las Marismas de Hinojos pudieran albergar en su seno la ciudad platoniana tuvo lugar a raíz de los estudios desarrollados por el equipo de científicos de la Universidad de Wuppertal, (Alemania), liderados por Rainer Kühne.

El científico teutón sustenta su hipótesis en base a unas fotografías realizadas por satélite en las que se apreciaba, en dichas marismas, dos estructuras rectangulares inmersas en varios anillos concéntricos que la rodean. Precisamente, tal y como describió el filósofo griego la Atlántida.

Este señaló que la 'isla' tenía 925 metros de diámetro rodeada por varias estructuras circulares, anillos concéntricos, algunos de tierra y otros de agua. En este sentido, sostenía que las estructuras podrían ser las ruinas de un "templo de plata" en honor a Poseidón, el dios del Mar, y otro templo de oro mayor, ínfulas de Poseidón y Cleito, descripciones que aparecen en Timeo y el Critias, en los diálogos escritos por Platón.

Precisamente y para justificar el hecho de que la Atlántida no se situara en una isla como describió el filósofo, Kühne hace suyas las conjeturas de su compañero Werner Wickboldt, que situó en España los vestigios de esta mítica ciudad que podría haber quedado sumergida entre los años 800 y 500 antes de Cristo por los efectos de una gran inundación. Wickbolt defendía que los griegos confundieron el vocablo egipcio costa y lo tradujeron como isla, error que fue heredado a través de los tiempos.



Artículo relacionado en Celtiberia.net: Congreso científico sobre la Atlántida

Via: TERRA ANTIQVA




Vide: Atlántida Histórica

OTRO POEMA DE FEDERICO GARCÍA LORCA INTERPRETADO EN GRIEGO: " ΜΠΑΛΚΟΝΙ " 1969



Federico García Lorca: Poema del cante jondo (1921): "Poema de la saeta"

Μπαλκόνι

Δείτε τη Λόλα που τραγουδάει

Την τριγυρίζουν μικροί τορέρος.

Δείτε τη Λόλα που τραγουδάει

Την τριγυρίζουν μικροί τορέρος.
κι από την πόρτα το μπαρμπεράκι
ρυθμό κρατάει με το κεφάλι.

Δείτε τη Λόλα που τραγουδάει
και τη χαϊδεύουν μέντα και βασιλικός

Δείτε τη Λόλα που τραγουδάει

Την τριγυρίζουν μικροί τορέρος.
κι από την πόρτα το μπαρμπεράκι
ρυθμό κρατάει με το κεφάλι.

Ναι, είν’ η Λόλα, που ώρες τώρα
καθρεφτιζόταν μέσα στα νερά.

Δείτε τη Λόλα που τραγουδάει

Την τριγυρίζουν μικροί τορέρος.
κι από την πόρτα το μπαρμπεράκι
ρυθμό κρατάει με το κεφάλι.


Balcón

La Lola
canta saetas.
Los toreritos
la rodean,
y el barberillo
desde su puerta,
sigue los ritmos
con la cabeza.
Entre la albahaca
y la hierbabuena,
la Lola canta
saetas.
La Lola aquella,
que se miraba
tanto en la alberca.

Traducción al griego: Lefteris Papadópulos
Música: Yannis Glesos
Canta: Yannis Pulópulos

DESCUBREN UNA TUMBA EN LA SEDE DE LOS ANTIGUOS REYES MACEDONIOS EN EL NORTE DE GRECIA


El hallazgo en las ruinas de Aigai tuvo lugar a pocos metros del notable descubrimiento el año pasado de lo que podrían ser los huesos del hijo adolescente asesinado de Alejandro Magno.

Vía: www.informador.com.mx

ATENAS, GRECIA.-Un grupo de arqueólogos descubrió una tumba en la sede de los antiguos reyes macedonios en el norte de Grecia que plantea un nuevo interrogante sobre una etapa de asesinatos e intrigas políticas de hace dos mil 300 años.

El hallazgo en las ruinas de Aigai, anunciado el viernes, tuvo lugar a pocos metros del notable descubrimiento el año pasado de lo que podrían ser los huesos del hijo adolescente asesinado de Alejandro Magno, según una experta.

Los arqueólogos están intrigados porque ambos restos fueron enterrados en circunstancias muy inusuales: aunque existían cementerios cercanos, los huesos fueron exhumados de una tumba anterior y vueltos a enterrar, contra todas las convenciones de la época, en el corazón de la ciudad.

La experta Chrysssoula Saatsoglou-Paliadeli dijo en una declaración que los huesos hallados esta semana estaban dentro de una de dos vasijas de plata desenterradas en el mercado de la antigua ciudad, cerca del teatro donde el padre de Alejandro, el rey Filipo II, fue asesinado en el 336 aC.

Agregó que posiblemente pertenecían a un personaje de la realeza macedonia y que fueron enterrados a fines del siglo IV aC.

Pero es demasiado prematuro como para conjeturar sobre su identidad antes de que se completen los exámenes para determinar el sexo y la edad, dijo Saatsoglou-Paliadeli, profesora de arqueología clásica en la Universidad Aristóteles de Tesalónica.

Agregó que una de las vasijas es ''muy, muy similar'' a otra hallada hace décadas en un túmulo real cercano, donde una de las tumbas fue identificada como la de Filipo II.

Alejandro fue uno de los generales más exitosos de la historia. En una serie de batallas contra el imperio persa conquistó gran parte del mundo conocido en ese entonces hasta llegar a la India.

Después de su muerte en el 323 aC, a los 32 años, el imperio de Alejandro se dividió tras una serie de guerras entre sus sucesores en las cuales murieron asesinados su madre, su hermanastro, su esposa y ambos hijos.

La arqueóloga Stella Drougou, también profesora de arqueología clásica en la misma Universidad, pero que no participó en el descubrimiento, dijo que el hecho de que las urnas funerarias no estuvieran enterradas en una tumba formal ''indica alguna forma de castigo o un acto ilegal''.

''En todo caso fue un hecho excepcional'', agregó, ''y sabemos que la historia de los reyes macedonios está plagada de venganzas y sucesiones violentas''.

Saatsoglou-Paliadeli cree que los huesos del adolescente hallados en el 2008 pueden haber pertenecido a Heracles, hijo ilegítimo de Alejandro asesinado durante las guerras de sucesión alrededor del 309 aC y enterrado en secreto.

''Esta es sólo una hipótesis'', aclaró.

Aigai, que floreció en los siglos VI y V aC, atrajo a artistas prominentes como Eurípides. La capital macedonia fue trasladada a Pella en el siglo IV aC y Aigai fue destruida por los romanos en el 168 aC.

Via: TERRA ANTIQVA

jueves, 27 de agosto de 2009

LA NAVEGACIÓN ATLÁNTICA EN LOS TEXTOS CLÁSICOS


Ángel Morillo y Carmen Fernández Ochoa | Museo Romano Oiasso www.oiasso.com 18/08/2009

La navegación atlántica en los textos clásicos.

El Océano fue para los hombres de la Antigüedad un territorio caótico e indefinido, cercano a la irrealidad, repleto de resonancias míticas y fantásticas, donde el sol desaparecía cada día, un finis terrae. Más allá del Estrecho de Gibraltar, escenario de las hazañas míticas de Hércules y Perseo, y de Gadir (Cádiz), extremo del oikouméne o mundo conocido y puerta hacia lo desconocido, se encontraban paraísos perdidos, como el Jardín de las Hespérides, la Atlántida platónica o las Islas de los Bienaventurados.

El propio Homero, y los poetas griegos arcaicos, como Hesíodo, Píndaro y Estesícoro, crean una imagen de ficción y misterio, que apenas pueden despejar los historiadores posteriores (Gómez Espelosín, 1999: 64). Heródoto muestra su desconocimiento del Atlántico, señalando tan sólo la presencia de las islas Casitérides (de “kassíteros”, estaño en griego), de donde procedía este metal. Siglos más tarde, Estrabón amplía nuestra información sobre dichas islas, señalando que eran diez y que se situaban en alta mar, al norte del puerto de los ártabros (Brigantium-La Coruña).

La existencia de las Casitérides sigue moviéndose dentro de las referencias fabulosas de los literatos griegos. La imprecisión respecto a su ubicación concreta, que se ha querido buscar tanto en la costa gallega como en las Islas Británicas, regiones ambas ricas en estaño, e incluso en la Bretaña francesa, impide conocer el alcance real de las navegaciones mediterráneas en aguas del Atlántico norte en época arcaica. Sin embargo, lo reiterado de las alusiones en los textos clásicos a estas islas nos lleva a considerar seriamente la existencia de visitas e intercambios comerciales oceánicos ya a partir de un momento muy antiguo, que debemos remontar al periodo comprendido entre los siglos VIII y VI a. C., y que cristalizarían en una hipotética ruta marítima fenicia hacia las fuentes septentrionales del estaño. Esta ruta estaría avalada por los hallazgos fenicios y púnicos en la fachada atlántica de la Península Ibérica, que se remontan al siglo VI y son especialmente abundantes a partir del siglo IV a. C., (Naveiro, 1991: 130-131; Millán León, 1998: 160-175).

El aumento de la documentación arqueológica en la fachada occidental de la Península a partir del siglo IV a. C. confirma la intensificación del comercio mediterráneo en este periodo, que tuvo que ir acompañado necesariamente por un incremento de los viajes exploratorios, de los que nos han llegado escasas noticias literarias y todas ellas indirectas. Pero los periplos más conocidos son los de Himilcón y Piteas, de los siglos V y IV a. C. respectivamente, que se enmarcan también dentro del interés púnico por alcanzar las Casitérides (Millán León, 1998: 173-175).

Ángel Morillo (Universidad Complutense de Madrid)
Carmen Fernández Ochoa (Universidad Autónoma de Madrid)

DESCARGAR TEXTO COMPLETO DE LA CONFERENCIA

Otras publicaciones del Museo Romano Oiasso

Via: CulturaClásica.com

HELENA PAPARIZOU CON CHAMBAO: "Papeles mojados"



Lo griego y lo hispánico fusionan bien, como el café y el chocolate...

lunes, 24 de agosto de 2009

LAS LLAMAS LLEGAN A LAS PUERTAS DE ATENAS


Un incendio de grandes proporciones avanza sin control en la región griega de Ática. El fuego, que comenzó el viernes en la localidad de Gramatikus, a 50 kilómetros de Atenas, ha arrasado 4.000 hectáreas, varias viviendas y se extiende hacia la periferia norte de la capital, espoleado por los vientos y las altas temperaturas. Se trata del peor incendio desde 2007, cuando varios frentes de fuego acabaron con la vida de 70 personas.

Las llamas alcanzaron ayer la periferia norte de Atenas, a unos 15 kilómetros del centro, obligando a las autoridades griegas a desalojar a unos 20.000 residentes de la localidad de Agios Stefanos. Tras haber declarado el estado de emergencia en el este del Ática el sábado, ayer el Gobierno griego tuvo que pedir ayuda a la UE para contrarrestar los fuegos, que anoche quedaban incontrolados en varios frentes.

La imagen más emblemática de este fuego es la de las columnas de denso humo negro que surgen tras la colina en la que se encuentra el Partenón, símbolo de la capital griega. Esta fotografía da una idea de lo cerca que está el frente del incendio.

viernes, 21 de agosto de 2009

LA PATRIA DEL TEATRO (Medea en Mérida)


Rosana Torres | Mérida www.elpais.com 15/08/2009

El director Tomaz Pandur y la actriz Blanca Portillo estrenan en el Festival de Mérida una Medea neorrealista en permanente fuga.
La primera vez que se representó Medea fue en el 431 antes de Cristo. Desde entonces se conoce esa tragedia de desamor y venganza con aquel texto de Eurípides o con el de otros creadores que han contado esa historia a su manera, como Séneca, Corneille, Pasolini, Anouilh, Ovidio y Heiner Müller, sin olvidar versiones operísticas (Cherubini y Theodorakis) o parodias musicales que llegaron a Broadway.

Medea ha marcado también a directores y actrices. Y al Festival de Teatro de Mérida, inaugurado y creado en 1933 por Margarita Xirgu, con una versión que Miguel Unamuno hizo de esta obra, basándose en Séneca. El Teatro Romano emeritense ha visto 16 Medeas interpretadas por actrices emblemáticas como Nuria Espert, Montserrat Caballé y Manuela Vargas. El próximo jueves ese escenario recibirá una nueva. Blanca Portillo, actriz que ha entrado por derecho propio en el universo de las grandes y elegidas, transita una vez más por el universo del esloveno Tomaz Pandur, con quien se encontró en Barrocco y Hamlet.

Fundador de la compañía Pandur Theaters, el director se ha convertido en uno de los más reclamados por teatros internacionales. Su propuesta cuenta con un prólogo y un epílogo en los que deja claro que Medea invita a soñar. Sueño que ha puesto en pie con su equipo de cabecera: los dramaturgos Darko Lukic y Livia Pandur, la música de Silence (más el Lacrimosa de Mozart), escenografía de Numen, coreógrafo Ronald Savkovic, vestuario de Angelina Atlagic y sus dos actores fetiche en España: Blanca Portillo y Asier Etxeandía. Junto a ellos dos importantes nombres de la escena: Julieta Serrano y Alberto Jiménez. Y un puñado de actores como argonautas y como mujeres de la Cólquide. Ellos trabajan la tierra en tiempos de paz. Ellas tocan y cantan músicas inquietantes con aires de sones de los Balcanes.

Su Medea es una mujer anónima, una refugiada, una exiliada que lleva 3.000 años caminando por el mundo. El poeta, al hablar de ella, se preguntó si puede haber mayor dolor que el de perder la patria. Pandur no oculta que su Medea tiene mucho de autobiográfica: "Yo he perdido mi país, que jamás volverá a existir. Soy yugoslavo, lo seré siempre, pero llevo 18 años tratando de encontrar mi país; Medea hace lo mismo hasta que se da cuenta de que no existe, que está en su corazón. Yo tengo el teatro, donde creamos nuestros propios mundos, donde escapamos de una realidad, para alcanzar otra en la que podemos creer, Medea es un homenaje, una deuda que tengo con el teatro". Pandur dice que, de tener patria sería el teatro: "Un lugar donde puedes ser tú, con todo el dolor, la rabia, la ternura; y aunque el ser apátrida te hace ser más fuerte, nunca estás en una situación confortable, lo que te hace arrastrar un complejo de inferioridad con el cual te levantas cada mañana y al tiempo que tomas el café tienes que enfrentarte a eso y tratar de superarlo". Guarda silencio. Portillo le mira asombrada, consciente de que Pandur está hurgándose las entrañas. El director continúa: "Eso de ¡qué buenos y talentosos somos! es todo mentira, lo de superar el complejo de inferioridad es lo brutal y lo importante, y decirte existo, soy, en lo bueno y en lo malo".

En su montaje, puesto en pie en la sala de ensayos del Teatro Español de Madrid, quedan cosas por matizar. Sabe que la obra durará menos de dos horas en las que Jasón y Medea se ven atrapados en mundos que evocan al neorrealismo italiano, atmósferas metafísicas e incluso esotéricas, imágenes de pinturas clásicas o los mundos de aislamiento, soledad y melancolía de Edward Hopper. "Es una Medea del cielo y de la tierra, con los pies sólidos, pero los brazos tan altos que pueden sostener el cielo", explican Pandur y Portillo en una conversación entre ellos. Pandur suelta cosas en español, menos cuando quiere afinar una idea que lo hace en inglés. Ella cuando quiere ser bien entendida, le habla en un inglés fluido. "Medea es una diosa, una protagonista de la mitología, pero también es protagonista de su propia vida. Intentamos traer 3.000 años de memoria emocional hasta hoy y para ello hay que tocar arquetipos básicos de la civilización que llevamos dentro; nuestro espectáculo está dedicado a aquellos que están en fuga, hablamos también de los refugiados del alma", señala Pandur para quien Medea representa el exilio en todos los sentidos. Portillo asiente y añade: "Los mitos están para ser destruidos, ella es un icono de estos tiempos, no es una mujer que se queje de su destino, no culpa a otras fuerzas".

"Como director es una oportunidad maravillosa para cocrear imágenes que una vez surcaron la superficie de los ojos de Medea", asegura Pandur quien de nuevo se enzarza a codeclarar con Portillo. "Hay seres humanos que nunca pertenecerán a paraísos concretos, para ser ellos quienes son se autoexpulsan, y eso molesta, es incómodo. Ése es el exilio interior de Medea, frente a Jasón que se mueve por un sueño abandonado a mitad camino, ahí está la traición a Medea", dicen ambos.

Pandur cree que la lectura que hacen en el montaje está entre lo apolíneo y lo dionisiaco. "El que la libertad de ella esté por encima de todo es la razón por la que Eurípides la salva, estamos ante un autor revolucionario", apunta Pandur mientras Portillo, menos nietzscheana y más freudiana, apostilla: "Ella es una Medea madre, no está enamorada por encima de sus hijos, simplemente no quiere para ellos una vida mediocre e indeseable y se dice 'yo les di la vida, yo se la quito'; y Jasón no sabe lo que está buscando, no sabe que el Vellocino de Oro es ella".

Ambos son conscientes de que a las piedras de Mérida hay que tenerles mucho respeto: "Es un sitio conectado entre la tierra y el cielo, como Medea, sabemos que es un lugar sagrado, pero nuestro trabajo está hecho con honestidad y amor". Ello no quita que Portillo en un ataque de sinceridad añada: "Yo me cago viva por sistema y en Mérida, pues más". La tranquiliza que Pandur tenga amplia experiencia en anfiteatros griegos y romanos.

Julieta Serrano, que ha visto muchas Medeas, confiesa que ésta le impresionó nada más leer la versión de Darko y Livia. Ella es de las poquísimas actrices que ha conseguido trabajar siempre con grandes innovadores de la escena y el cine. Aún hoy, ya septuagenaria, siguen reclamándola los vanguardistas del teatro. "Me halaga, me pirria y las propuestas de Pandur me han estimulado mucho; lo fascinante es que tras llevar a cabo sus sugerencias que no siempre entendía, me daba cuenta luego de por qué las hacía, es de una imaginación sobresaliente y nunca gratuita".

Asier Etxeandía, que transita por dos personajes, un Centauro pasoliniano y un chulazo mediterráneo, dice: "Pandur es lo más cercano al arte que yo conozco". Destaca la profunda investigación que Pandur ha hecho en torno a cuestiones culturales, sociales, geográficas y políticas de la época en la que se sitúa la acción.

Los únicos dos actores que tienen la experiencia de haber trabajado en el Teatro Romano de Mérida son Serrano y Alberto Jiménez. "Esta Medea está marcada por el esfuerzo por humanizar los personajes, intentando reconocer qué hay de cotidiano en lo que les pasa", dice Jiménez, quien al hablar de una escena entre él y Portillo sostiene que podría haberla escrito Almodóvar: "Y es de Eurípides, este montaje tiene algo de budismo balcánico, lo que pretende contar Pandur tiene que ver con el encuentro de comunión máxima entre dos seres humanos, está siendo un viaje alucinante; he oído por ahí decir que Pandur es un esteta, cuando lo que pasa es que tiene una concepción global de lo que es un espectáculo, no quiere tanto actores, si no artistas que sepan tocar, bailar, cantar...; he trabajado con gente muy interesante, pero esta mirada tan global y este empeño de tocar algo tan profundo, nunca lo había visto".

Darko Lukic, profesor de la Academia de Arte Dramático en Zagreb (Croacia) y uno de los grandes dramaturgos y novelistas de la antigua Yugoslavia, comenta que él y Pandur se plantearon una Medea contemporánea. "Eurípides es un gran clásico al que podemos leer, admirar, respetar, pero con modos muy contemporáneos, la historia de Medea trata de inmigrantes y apátridas de un mundo civilizado y bien organizado, pero no abierto a los diferentes, y ser mujer en una civilización muy masculina y machista es el viaje de una tragedia". Tanto Pandur como Lukic sostienen que el secreto de este mito aún no ha sido desvelado: "Un velo de misterio aún lo cubre, permanece aún sin resolverse, y también es la historia de una tragedia íntima de un amor desgraciado".

Medea. Festival de Teatro Clásico de Mérida. Teatro Romano. Del 20 al 23 y del 25 al 30 de agosto.


martes, 18 de agosto de 2009

UN POEMA DE FEDERICO GARCÍA LORCA EN GRIEGO



Federico García Lorca - "La Canción del Jinete"

Κόρντομπα!
Μακρινή και μόνη.

Πουλάρι μαύρο, φεγγάρι γεμάτο
κι ελιές στο δισάκι μου.
Αν και τους ξέρω τους δρόμους,
ποτέ δεν θα φτάσω στην Κόρντομπα!

Αχ, τι ατέλειωτος δρόμος!
Αχ, πουλάρι μου γενναίο!
Ο θάνατος -αχ- με καρτεράει,
πρότου να φτάσω στην Κόρντομπα!

Κόρντομπα!
Μακρινή και μόνη!

Μές' απ' τον κάμπο, μέσα από τον άνεμο,
πουλάρι μαύρο, φεγγάρι κόκκινο.
Ο θάνατος με παραμονεύει
από τους πύργους της Κόρντομπα!

Αχ, τι ατέλειωτος δρόμος!
Αχ, πουλάρι μου γενναίο!
Ο θάνατος -αχ- με καρτεράει,
πρότου να φτάσω στην Κόρντομπα!

Κόρντομπα!
Μακρινή και μόνη!


Córdoba.
Lejana y sola.
Jaca negra, luna grande,
y aceitunas en mi alforja.
Aunque sepa los caminos
yo nunca llegaré a Córdoba.
Por el llano, por el viento,
jaca negra, luna roja.
La muerte me está mirando
desde las torres de Córdoba.
¡Ay qué camino tan largo!
¡Ay mi jaca valerosa!
¡Ay, que la muerte me espera,
antes de llegar a Córdoba!
Córdoba.
Lejana y sola.

Traducción al griego: Lefteris Papadópulos
Música: Yannis Glesos
Canta: Yannis Pulópulos

Se cumple hoy el 73º aniversario del fusilamiento de uno de los más universales poetas españoles. Federico García Lorca tan solo contaba con 38 años de edad recién cumplidos.
Dotado de cualidades de poeta, dramaturgo, músico, pintor y actor, fue asesinado en la madrugada del 18 al 19 de agosto de 1936. Junto a él fueron ejecutados el maestro Dióscoro Galindo y los banderilleros Francisco Galadí y Joaquín Arcollas.

La presencia del mito griego y de la cultura clásica es una constante en la obra lorquiana, que cuenta entre sus traductores más ilustres a Nikos Gatsos, Nikos Kazantzakis y Odisseas Elytis, quien reconoció la importancia capital de Lorca en gran parte de su poesía. De hecho, García Lorca sigue siendo un modelo poético para muchos escritores griegos y está considerado como el autor extranjero que más ha influido en la poesía griega contemporánea.

viernes, 14 de agosto de 2009

"EDIPO, UNA TRILOGÍA" Estreno en el LV Festival de Mérida


Cristina Sánchez Correa (Efe) Mérida

La fuerza de la palabra, en detrimento del lirismo de la tragedia clásica, así como una puesta en escena innovadora y vanguardista, primaron esta noche en la presentación de 'Edipo, una trilogía' de Georges Lavaudant en el teatro romano de Mérida.

Esta tragedia familiar, compuesta por una "trilogía imaginaria" de las obras de Sófocles: 'Edipo Rey', 'Edipo en Colono' y 'Antígona', fue representada ante casi 2.000 espectadores en una versión contemporánea radicalmente alejada de la estética propia del teatro clásico.

Unos 2.400 años después, la palabra del poeta griego sigue viva y el verdadero motor e inspiración de los personajes, la máxima "conócete a ti mismo", conectó rápidamente con los asistentes que se sintieron identificados con un Edipo —interpretado por Eusebio Poncela— enigmático, contradictorio y lleno de un ferviente deseo por conocer sus orígenes y su destino.

Así, la interpretación más pura salió a relucir en el escenario y los personajes, casi inmóviles, dieron vida a una familia perseguida por el fatídico destino del oráculo Miguel Palenzuela.

Eusebio Poncela ofreció una fantástica interpretación de Edipo, que pasó de ser rey de Tebas a ser desterrado a Colono, en Atenas, consumido por la consecuencia de sus actos, asesino de su padre y esposo de su madre, y terminó sus días ciego y desvalido ayudado por su hija Antígona.

El vestuario, caracterizado por atuendos largos negros, contribuyeron a la simplificación del montaje, una vez más, dando prioridad a la belleza de la palabra sofocliana, traducida por Daniel Loayza y vertida con maestría al castellano por Eduardo Mendoza.

Con un calor de justicia en pleno mes de agosto, en la primera parte, el montaje nos trasladó a un cine abandonado de los años 50 donde los actores, bajo una iluminación ínfima, se sucedieron como apariciones fantasmales sólo interrumpidos por el ruido de un antiguo proyector.

La puesta en escena de la segunda parte, formada por 'Antígona', sorprendió aún más: la pantalla se convirtió en un elemento más de la obra, los actores hablaban con otros personajes reflejados en la misma, mientras esta mostraba imágenes cargadas de simbolismo.

En palabras de la actriz Laia Marull, Antígona se constituye en "la determinación pura", su ambición es "hacer lo que cree que es correcto con todas las consecuencias hasta cavarse su propia tumba y decidir suicidarse antes de que la maten".

La apuesta por la ausencia de artificios líricos o de emociones postizas cuajó entre el público que, aunque disfrutó del montaje, en algunos momentos echa en falta algo de dinamismo ante la excesiva sobriedad de una obra que huye de toda parafernalia y grandilocuencia para atrapar a los espectadores.

Tras la obra, la actriz Rosa Novell, que interpretó a Yocasta, explicó que el enfoque de esta versión se asemeja a "una novela policiaca", un 'thriller' en el que los personajes evolucionan en una intensa búsqueda que les lleva a la locura.

Por su parte, el hermano de Yocasta, Creonte, a cargo de Pedro Casablanc, adquiere un papel principal en 'Antígona', convirtiéndose en un tirano despiadado y que, para el actor, es "un fanático y eso es lo peor que mueve las conciencias humanas".

Después de su paso por Madrid y Barcelona, 'Edipo, una trilogía', cerrará su periplo en el LV Festival de Mérida el próximo domingo y se despedirá de la escena teatral española dejando un buen sabor de boca gracias a su arriesgada pero efectiva versión de las obras de Sófocles.

lunes, 10 de agosto de 2009

EL JARDÍN DE HIPATIA de Olalla García


Ciertas personalidades dejan su impronta en la Historia. Se trata de seres excepcionales, tanto para sus coetáneos como para las sucesivas generaciones que les relevan. Hipatia de Alejandría es una de ellas: una mujer asombrosa que ya mereció la admiración de sus contemporáneos y que, pese al transcurso de los siglos, continúa suscitando enorme estima o profunda animadversión.

Nuestra búsqueda de ideales la ha convertido en un símbolo, en detrimento de la mujer de carne y hueso que un día recorriera las calles de Alejandría. Sus propios contemporáneos la erigieron en mártir, en encarnación de las virtudes éticas, de los valores paganos o de la amenaza intelectual que la filosofía supone para el poder político. Los tiempos modernos la presentan como heroína de la razón, de la ciencia o de los postulados feministas.

El jardín de Hipatia despoja a esta mujer extraordinaria de las múltiples capas de las que la ha revestido el paso de la Historia y nos permite contemplarla tal como la veían sus alumnos. Pues únicamente así podremos valorarla no sólo por lo que representó y representa, sino, ante todo, por lo que fue.

LA BÚSQUEDA DE LA VIRTUD

Año 413 d.C. El caballero Atanasio de Cirene desembarca en Alejandría con la esperanza de unirse a la academia de la maestra Hipatia, cuya escuela de filosofía goza de enorme fama en todo Oriente. Procede de una provincia devastada por la guerra, en la que él mismo ha combatido como oficial.

EL ENCUENTRO CON LA SED DE PODER

Pronto comprobará que las luchas de poder en el seno de una de las ciudades más fastuosas y opulentas del Imperio pueden llegar a ser tan cruentas, despiadadas y letales como los ataques de las hordas del desierto. En contra de su voluntad, se verá envuelto en la batalla por la hegemonía entre el patriarca de Alejandría, Cirilo, y el prefecto augustal, Orestes.

ADVERSARIOS IRRECONCILIABLES

Desde el ágora hasta las escuelas de filosofía, de los grandes palacios y basílicas hasta los barrios en ruinas de los indigentes, este relato sumerge al lector en una ciudad fascinante en la que la sofisticación y el lujo se dan la mano con la crueldad y la más descarnada ambición.

SUMÉRGETE EN UNA CIUDAD TUMULTUOSA Y LUCHA POR CONSERVAR LA INTEGRIDAD... Y LA VIDA.

LA AUTORA

Olalla García nació en Madrid. Durante su infancia vivió además en Castellón, Alcázar de San Juan y Cartagena, antes de que su familia se instalara en Alcalá de Henares. Las sucesivas mudanzas le inspiraron el deseo de seguir descubriendo nuevos lugares y costumbres, pero también le ofrecieron la cualidad de valorar lo ya conocido.

Tras terminar sus estudios de Historia retomó el hábito de los traslados, esta vez a través de Europa. Ha vivido en Nottingham, Bolonia, París, Rávena, Estrasburgo y Dresde. Cada lugar le ha dejado su propia marca, la ha ayudado a atesorar vivencias, a descubrir más sobre la alteridad y sobre sí misma, y a confrontar experiencias.

Cuando está en casa le gusta: beber té, escuchar ópera, leer libros de historia y devorar buenas novelas. También le gusta pasear por el campo y recorrer el casco antiguo de una ciudad. Lo primero oxigena, lo segundo inspira: cada calle es una página del pasado que sigue escribiéndose en el presente.

Aprender lenguas es otra de sus grandes aficiones; de hecho, son imprescindibles para comprender bien la Historia, sobre todo la más antigua. Habla con fluidez cinco idiomas, además de haber estudiado varias lenguas muertas, tanto clásicas como propias de las culturas de Próximo y Medio Oriente. Esto le ha permitido documentar sus novelas acudiendo a las fuentes originales de la Antigüedad, así como revisando las publicaciones de los mejores especialistas contemporáneos.

viernes, 7 de agosto de 2009

LA ITALIA HELÉNICA, LA MAGNA GRECIA


Por XAVIER FEBRÉS, Siracusa

SIRACUSA, TRAS LOS PASOS DE LA MAGNA GRECIA

El territorio del sur de Italia, colonizado por los navegantes hace 3.000 años, era tan próspero que pasó a ser conocido como El Dorado de la antigüedad.

• Hubo un tiempo en el que la ciudad siciliana fue la segunda urbe de Grecia. Hoy juega un papel secundario en la región, pero conserva tesoros como el museo o las ‘passeggiattas’ al atardecer.

SIRACUSA

Cuando 3.000 años atrás navegantes fenicios y griegos del Mediterráneo oriental se aventuraban más allá de sus costas, huyendo del hambre y abriendo nuevos mercados, el estrecho siciliano de Mesina era la temida boca del mundo desconocido. Enfrentados a leyendas y superados los miedos, los primeros colonizadores descubrieron en la isla de Sicilia una tierra más feraz que feroz.
La prosperidad de las nuevas ciudades griegas del sur de Italia llevó a esta región a ser conocida como Magna Grecia, en un sentido de ampliación más que de superioridad. La Sicilia griega alcanzó a sumar 1.300.000 habitantes en el siglo V a. C., un nivel que no recuperaría hasta el siglo XVIII. Siracusa tuvo entonces un censo de 200.000 personas que todavía no ha recuperado. La Magna Grecia fue el Nuevo Mundo, la América griega, y se convirtió en la Nueva York helénica, la segunda ciudad en importancia tras Atenas.
Los siracusanos de hoy se consideran más griegos que los fenicios de Catania o los árabes de Palermo. En realidad, Siracusa juega actualmente un papel subalterno en comparación con la vecina segunda ciudad siciliana de Catania, que se encuentra únicamente a 70 kilómetros, la duplica en población y cuenta con aeropuerto.

Tradiciones perdidas

Hoy, la ciudad vieja siracusana, en el barrio de Ortigia, sigue actuando de centro urbano y despunta por tres factores derivados de su pasado. Primero, por la estratégica lámina de agua mansa del Porto Grande. En segundo lugar, por uno de los poquísimos museos arqueológicos de toda la cuenca mediterránea que por su modernidad despierta entusiasmo al esforzado visitante de museos. Finalmente, por la plaza del Duomo, considerada como una de la más bellas de Italia, lo que constituye un superlativo poco trivial.
La bahía siracusana ha generado afortunados lungomares o paseos marítimos urbanos, escenarios de las tradicionales passeggiatas del atardecer, concretamente de la passegiata a mare. Más que una tradición, es una expresión de cultura, ya perdida en la mayoría de otras ciudades invadidas por los coches o afligidas por el ritmo de vida desenfrenado. En Siracusa, a la hora del aperitivo previo a la cena, una visible proporción de la población comienza a deambular lentamente arriba y abajo en un itinerario establecido, sin más objetivo que tomar el fresco, saludarse, chusmear y caminar un ratito en sociedad.
Representa un instante amable del colectivo humano, un punto de suspensión en el mundo de la vida globalizada, un recuerdo de antaño que sorprende reencontrar en versión original. Las agencias de viajes no organizan vuelos chárter para acudir a la passeggiata vespertina en el lungomare de Siracusa, aunque tendría más atractivo que otras cosas que proponen.

Museo ejemplar

Los autocares desembarcan a los visitantes en el yermo desolado del teatro griego de Siracusa, el segundo en dimensión de la órbita helénica, con 15.000 localidades en las gradas. No queda más que el hoyo, sin ningún elemento que amenice el lugar. El tíquet de entrada al teatro griego ofrece una segunda visita resignada al vecino museo arqueológico. Entonces se produce la sorpresa. Poquísimos museos arqueológicos pudieron estrenar las instalaciones en 1988 como lo hizo este. No es solamente uno de los principales de Europa por sus fondos, sino que también lo es por la astucia de las instalaciones, dentro de lo que supone estar ubicado en los parámetros de una pequeña ciudad.
Su pieza más famosa, la Venus Anadiómena o Venus Landolina (es decir, surgida de les aguas o bien designada con el nombre del arqueólogo que la descubrió en 1804, Saverio Landolina), se ha visto muy bien colocada en un cruce de pasillos para subrayar la concupiscencia que a veces puede despertar un trozo de mármol. La piedra descabezada y manca de la Venus de Siracusa emite una sensualidad turbadora por la elocuencia de las formas corporales y el instante sugerente que evoca la salida del baño. Sostiene con la mano, frente al pubis, el ropaje que cae alrededor de las piernas, y describe con los pliegues una concha destinada a enmarcar la mitad inferior de la figura sin ocultar su trasero, proporcionado de forma eminente.
En las páginas del libro El pont de la mar blava, uno de los poquísimos intentos de volver a trazar los rastros de la expansión medieval catalana en el Mediterráneo, Lluís Nicolau d’Olwer comprobaba en Siracusa el debate suscitado por dicha Venus: “Contemplen esta soberbia factura anatómica, observen la morbidez de estas carnes que la mano apresaría. Reparen en el leve temblor de este hombro, como si acabara de herirlo un aliento frío. Fíjense en la vida que toma todo su cuerpo de las vetas apenas visibles del mármol. ¿No quieren que sea la diosa naciente de les olas? Bien: es una mujer saliendo del baño. Es la mujer en la plenitud seductora de sus gracias. ¿No tiene cabeza? Mejor. Sobre el cuerpo turbador y admirable pónganle la cabeza soñada, la de los ojos en que amen reflejarse, la de los labios que les resulten más dulces”.
El tercer gran privilegio de Siracusa es la plaza del Duomo, una rambla de reducidas y agraciadas dimensiones cerrada al tráfico rodado en el centro histórico, uno de los puntos donde la belleza urbana de la Italia barroca provoca la fascinación más adictiva. Concentra el ayuntamiento y el palacio arzobispal, además de terrazas de café igualmente institucionales. Basta con sentarse en ellas y dejar pasar el tiempo para que se produzca el milagro, la posesión fugaz de la belleza.

Via: El periódico.com