domingo, 21 de noviembre de 2010

HELENA PAPARÍZOU: "ΓΥΡΝΑ ΜΕ ΣΤΟ ΧΘΕΣ"




ΓΥΡΝΑ ΜΕ ΣΤΟ ΧΘΕΣ

Τους αγγέλους πάντα ονειρεύομαι αλλά,
με τους δαίμονές μου ζω και υπάρχω τελικά
Φοβάμαι μα να΄μαι εδώ μπροστά
φοβάμαι μα στα πόδια δε το βάζω πια

Γύρνα με στο χθες
σαν παλιά ταινία η ζωή μας να παίξει
πλάνα με σιωπές μέχρι στο φιλί μας
η ανάσα ν΄αντέξει

Έχεις βρει άλλη αγάπη
ή μονάχος τριγυρνάς
γη μου σαν το φεγγάρι
γύρω απ΄το όνειρο γυρνάς
ο θυμός σου είναι άμυνα στον φόβο
μη τυχόν και αισθανθείς
χωρίς μια πατρίδα νικητής

Έχουμε όλοι ευθύνες που αποφεύγουμε καλά
μα μπροστά της κάποτε τις βρίσκει η καρδιά
Με δένει,ο έρωτας χτυπά
και θέλει να μη ζούμε εμείς μηχανικα.

Μουσική:Σαμπάνης Γιώργος
Στίχοι:Βραχάλη Ελεάνα
Δισκογραφική Εταιρία:Sony Music Entertainment Greece 2010
Τιτλος Αλμπουμ:Γύρω Από Τ' Όνειρο(2010)
Πρωτη Εκτελεση:Έλενα Παπαρίζου

domingo, 14 de noviembre de 2010

"SÓCRATES" de Roberto Rosellini ( 2ª parte)



Fragmento de la película Sócrates de Roberto Rosellini (1971), en el que Sócrates se defiende ante los atenienses de las acusaciones de Anito y Meleto. Recomiendo ver la película completa.

"Un espíritu libre no puede aprender como esclavo [...] La semicultura es peor que la ignorancia porque nos engaña. Su engaño hace posible tenernos atados de pies y manos, subyugados por quimeras. La semicultura, en efecto, es la ilusión de saber. Los medios de comunicación nos alimentan a diario con estímulos y con noticias. Pero estos medios, no lo olvidemos, están al servicio de grupos dominantes que los manejan a su antojo..."

domingo, 7 de noviembre de 2010

LOS CÍNICOS GRIEGOS COMO PRELUDIO ANARQUISTA


Carlos García Gual www.elpais.com 30/10/2010

Bajo el emblema del perro (kúon) los filósofos cínicos aparecieron en la vieja Atenas como un movimiento de oposición radical a la cultura y la política de la época.

Con su actitud irreverente despreciaban la civilización y todas las convenciones sociales en su audaz invitación a la anarquía, rechazando el orden, con libertaria desvergüenza. Proclamaron la igualdad de todos los seres humanos, sin distinción de clases, naciones ni sexos. Eran cosmopolitas, no participaban en los asuntos de la ciudad, aborrecían los lujos y comodidades, se burlaban de los ritos y las creencias religiosas, prescindían de los placeres refinados, gustaban del amor libre, y consideraban el trabajo y el esfuerzo fundamento de la virtud.

Todo ello, como es obvio, resultaba muy provocativo en el mundo griego, incluso en una democracia como la de Atenas; y muy en contra de lo que pensaron Platón y Aristóteles. Por otra parte, no ambicionaban el poder ni pretendían cambiar la sociedad insensata de la época proponiendo un nuevo modelo antiburgués. Por más que imaginaron curiosas fantasías utópicas de diseño igualitario y anarquista. Fueron, por lo tanto, más rebeldes que revolucionarios, pensadores individualistas, sin grandes ilusiones respecto a la aceptación de sus puntos de vista por la gran mayoría de sus convecinos. (Si el sabio Bías dijo que "los más son malos", muchos filósofos pensaban que la mayoría de la gente son necios).

Los cínicos fueron una secta filosófica callejera y sin escuela fija. Perduraron como alegres vagabundos de mantos burdos, alforja mínima y bastón de peregrino. A través de Antístenes conectaban con Sócrates, y después, gracias al amistoso Crates, inspiraron a Zenón y los estoicos, filósofos más respetables y predicadores virtuosos.

El tipo más famoso de la secta fue Diógenes, apátrida y mordaz, que no tenía nada, vivía en una tinaja, se burlaba de todo, y escandalizaba a menudo. De él circularon pronto estupendas anécdotas, como la famosa de que, cuando Alejandro le visitó y dijo que le pidiera un deseo, le repuso que se apartara del sol y no le hiciera sombra.

El buen cínico no espera nada, no desea nada; austero, apático, libre, busca una vida natural, como la del perro. En su "regreso a la naturaleza" anticipa la conocida tesis de Rousseau acerca del "buen salvaje", y resulta un evidente precursor de los afanes ecológicos modernos.

Crates imaginó una isla ideal poblada de cínicos, Pera (la de la Alforja), "sin necios, ni parásitos, ni glotones, ni culos prostituidos; que produce tomillo, ajos, higos y panes; cosas que no invitan a guerras ni honores, y donde no hay armas ni dinero".

Como señaló Peter Sloterdijk, el cínico antiguo es muy distinto del tipo que ahora llamamos "cínico" (para su distinción utiliza la consonante: Kynikós frente a Zynikós). El cínico moderno es más bien un hipócrita: no cree en nada y desprecia en su interior las convenciones sociales; pero disimula y se somete por comodidad y afán de medro.

El anarquismo moderno es una doctrina revolucionaria y de empeño político. Surge de un anhelo de una sociedad mejor, más justa e igualitaria; es filantrópico y compasivo, si rechaza el orden actual (anarquía viene del griego an-arché "desorden") es porque confía construir otro, mejor para todos, donde reine la libertad y no la opresión, en un mundo feliz. En ese ideal pueden percibirse todavía algunos ecos de la utopía antigua.



Via: CulturaClásica.com